En la casa de la familia Molina Cabrera, ubicada en el barrio Pedro Argudo, de la ciudad de Biblián, los meses de noviembre y diciembre de cada año se vive y se respira el ambiente de Navidad.
Un incontable número de luces, adornos y un nacimiento de grandes dimensiones, con cientos de figuras navideñas, llenan de colorido al barrio. Esta tradición viene desde hace más de 70 años y se conserva con las nuevas generaciones.
Centenares de elementos
La familia cada año se esmera para realizar llamativas decoraciones de su Belén, con nuevas figuras y adornos, donde se recrea el nacimiento de Jesús.
Más de 600 piezas entre figuras de la Virgen María, San José, el Niño Jesús, los reyes magos, animales, renos, árboles, pastores, casas, ríos, puentes, ferrocarril, iglesias y hasta un teleférico, dan vida a este nacimiento armado en la planta baja de la casa. Del total de figuras, el 80% son elaboradas en madera y cartón con el uso de una “cierra de joyero”, por los integrantes de la familia, el 20% son compradas.
Desde los abuelos
David Molina comenta que esta tradición viene desde su abuela Mercedes Molina Romero, cuando Biblián todavía era parroquia. Comenta que en esa época realizaban el nacimiento al interior de la vivienda de su prima Carmelina Pesántez, quien era como su mamá de crianza. Recuerda que en esa época elaboraban su Belén con ramas y montes que traían del cerro, musgos, líquenes, bromelias y helechos, y en los días en torno a la Navidad, en cada casa se reunían para rezar a novena y disfrutar de los alimentos propios de esta fecha.
En esos años el nacimiento era emplazado para la visita de familiares y allegados, sin embargo, desde el año 2013 se abrió al público para que visiten desde noviembre hasta los primeros días de enero.
Cada año hay temáticas nuevas en relación al nacimiento del Niño Jesús, y de acuerdo a las mismas, se elaboran nuevas piezas y se decora el espacio.
Toman la posta
Las figuras en un inicio eran elaboradas a mano, por don David, luego se unió su hijo Paolo, y ahora su nieto Paolo David, quien ha tomado la difícil tarea de continuar con la tradición de la familia.
“Nuestra intención con la elaboración del nacimiento y la decoración con luces, es incentivar a niños y jóvenes a imitarlos, donde se demuestre que están vivas las costumbres y tradiciones”, expresa.
Visita de familias y turistas
La familia exhibe así su nacimiento gigante elaborado en madera, con más de 600 figuras, además puede observarse 137 nacimientos en miniatura.
Este año a más del nacimiento, en los exteriores de la vivienda se ha colocado un globo aerostático que mide 4 metros; este se complementa con los centenares de luces multicolores y faroles de otros vecinos que también decoraron sus casas. La ciudadanía puede visitar el vistoso lugar, de 18:00 a 22:00, hasta el 6 de enero siguiente.
Registro de visitas
Algo singular en esta residencia es que cuentan con un cuaderno de registro de visitas al nacimiento, donde personas de otros cantones y provincias, incluso de otros países, dejan escritos sus mensajes.
Don David manifiesta que la aspiración es continuar con esta tradición, que no es solamente de la familia Molina Cabrera, sino parte de la identidad de Biblián. (I)