El Tribunal Primero de Garantías Penales del Cañar, declaró culpable a Edison Stalin Espinoza Pesántez, y lo sentenció a 10 años de cárcel en calidad de autor del homicidio de Jamil T. S., registrado el 3 de septiembre de 2021, en la parroquia Luis Cordero del cantón Azogues. 

El Tribunal Penal también ordenó al sentenciado cancelar 205 mil dólares como reparación integral a los familiares de la víctima, además del pago del tratamiento psicológico a favor de los deudos.

El hecho investigado por Fiscalía se produjo a las 22:45 del 3 de septiembre del año pasado, en el parque central de la parroquia Luis Cordero.

De acuerdo a las investigaciones realizadas por el fiscal del caso, Felipe Hidalgo, el agredido y Espinoza Pesántez -quienes eran amigos- se encontraban ingiriendo bebidas alcohólicas junto a una tercera persona, en el parque central. Tras una discusión, el agresor le propinó varios golpes en la cabeza, rostro y cuerpo con un objeto contundente (palo), provocándole la muerte.  

Horas después, moradores de la zona divisaron al joven que se hallaba tendido sobre la vía y dieron aviso al ECU 911 para solicitar la presencia de la Policía. El cuerpo presentaba máculas de sangre, en su rostro y golpes en la altura de la cabeza; además, estaba sin camiseta.

Después de la mortal agresión, el infractor habría abandonado el lugar y estuvo huido varios meses, sin embargo, fue aprehendido por la Policía y días después, recibió prisión preventiva.

La Fiscalía demostró la materialidad del delito mediante la identificación y levantamiento del cadáver,  la inspección ocular técnica, reconocimiento del lugar de los hechos, testimonio de un testigo que presenció el hecho, cámaras de seguridad, entre otras. La autopsia médico-legal fue fundamental ya que determinó la causa de la muerte: una fractura múltiple a nivel del cráneo encefálico por golpes de objeto contundente.

Jorge Vélez, fiscal provincial del Cañar, manifestó que las grabaciones de las cámaras de seguridad (audio y video) y el testimonio de un testigo ocular presencial, aportó para lograr la condena.

El ciudadano cumple la pena privativa en el Centro de Rehabilitación Social, de Azogues. (I)

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